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Se viralizó el video de la travesía a caballo que realiza un adolescente del oeste del departamento Belgrano para ir a la escuela en Mendoza

(26-11-17) Marcelo Alcaráz tiene 14 años y vive junto a su familia en Bajada Grande, cerca del Río Desaguadero, el límite entre San Luis y Mendoza, al oeste del departamento Belgrano. Semanalmente debe cruzar a caballo nuestra Provincia para poder ir a estudiar.  En San Luis, además de no tener escuela cerca, tampoco tienen agua y están incomunicados.

El muchacho cursa el 2° año en la escuela rural N° 4-254 “Sede Arroyito” ubicada en el Secano Lavallino, en la Ruta 51, kilómetro 105 del departamento Lavalle de la vecina provincia. Él y su hermana menor, María de los Ángeles, realizan 9 kilómetros a caballo para poder ir a la escuela, donde se albergan toda la semana. Por iniciativa de una docente, Sandra Agüero, el alumno filmó su recorrido con su celular y armó un emocionante video que la semana pasada se viralizó en las redes sociales y en los medios de prensa mendocinos. 

En el video se puede ver como los hermanos cabalgan al rayo del sol mientras Marcelo comenta el recorrido y describe la geografía del lugar desde que sale de su casa en el campo de Bajada Grande, en San Luis, hasta llegar a la escuela en Mendoza.




En comunicación con Mariano Alcaráz, papá de los niños puntanos que cabalgan hasta la escuela de Mendoza, pudimos saber que son ocho las familias que viven en ese inhóspito paraje, aislados, incomunicados y sin agua.

"El acueducto (Nogolí) llega hasta un campo 14 kilómetros antes del mio y quedamos como ocho familias sin ese beneficio tan necesario",comenta el padre de familia que debe pedir habitualmente a Vialidad que le lleve agua a su campo para llenar las cisternas. En la zona hay energía eléctrica pero no cuentan con señal de wifi ni de celular, están completamente incomunicados.

Mariano cuenta que la escuela puntana más cercana a su casa está a 25 kilómetros, en el paraje Las Lagunitas, donde además se ubica la antena de wifi más próxima a su casa, donde -obviamente- no llega la señal.

A la dura rutina diaria que enfrenta la familia Alcaráz, pequeños productores rurales, se le suma que el año pasado se les incendió su casa y aun no logran rehacerla. "El video surgió por el sacrificio que hacen mis hijos para ir a la escuela. Muchos otros alumnos tienen becas y la escuela muy cerca de sus casas; mi hijo no tiene beca y es más, ni donde vivir porque se nos quemó la casa hace un año y no recibimos ayuda del Gobierno tampoco", comenta Mariano, quien también fue alumno de la misma escuela albergue mendocina.

"La escuela tiene muy buena educación, es muy linda y nos brindan todos los beneficios. Es lo más cercano y cómodo que tenemos", explicó.







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